En este tercer post nos seguimos preguntando si existe la casualidad. En los capítulos anteriores ( capítulo 1 y capítulo 2) te he compartido parte de mi viaje por América del Sur. Seguimos en Cuenca (Ecuador), ya hemos creado un contexto y ya has visto 3 casualidades que impactaron profundamente en mi viaje y en mi vida.
También nos hemos adentrado en el concepto de sincronicidad que creó el psicólogo suizo Carl Gustav Jung a partir de sus investigaciones en consulta con sus clientes.
Lo que haremos en este capítulo es ahondar en el concepto de sincronicidad y te contaré la cuarta casualidad o sincronicidad que apareció en mi viaje.
La cuarta casualidad: 9.000 KM
Si te parece, seguimos con mi viaje para descubrir mi vocación, mi propósito, ¿Qué hacer con mi vida?
Había transcurrido algo más de una semana, seguía viviendo en Cuenca en modo estudiante disfrutando de mis clases de guitarra y portugués, ilusionado por conocer más acerca de la profesión de coach y empezando a buscar una escuela donde formarme en Latinoamérica.
El hecho, es que un día paseando por la ciudad me encontré un letrero fijado en una pared que me llamó la atención.
En este cartel se promocionaba un curso de PNL que duraba 2 días.
En mi vida había escuchado esa palabra y tuve que buscar en Google para saber qué significaba. Pero lo que más me sorprendió de este cartel, es que el formador que impartía el taller se llamaba Xavier Pirla.
Obviamente Xavier es un nombre catalán e intuí que podríamos ser compatriotas.
Así que entré en la web de la escuela, Talent Institut y efectivamente, confirmé que tenía la sede en Barcelona.
Esto fue un shock para mí, ya que me encontraba a más de 9.000 km de mi casa, y me iba a encontrar con un compatriota que venía a dictar un curso en Cuenca.
Además, indagando un poquito más acerca de Xavi, descubrí que inicialmente se formó y trabajó como ingeniero pero en un momento de su vida, se reinventó hasta convertirse en el primer Máster Trainer en Programación Neurolingüística de la mano de Richard Brandler. Y a partir de ahí creó su propia escuela dedicada a enseñar PNL.
Esto también fue una señal para mí, ya que me encontraba justamente en un proceso de reinvención y Xavi podía ser un ejemplo a seguir. Él también había abandonado el camino que se suponía que debía seguir para apostar su pasión. Así que me dejé fluir de nuevo por las casualidades y me inscribí en el taller de 2 días.
Pero si piensas que la casualidad termina aquí, te tengo que decir que lo más lo más desafiante estaba por llegar.
Taller de PNL 24 y 25 de noviembre de 2011
En homenaje a este momento sincrónico, publico este post el 24.11.21, justo 10 años después de que asistiera al citado taller.
Dimos inicio al taller y en una de las pausas me acerqué al escenario a saludar personalmente a Xavier, para comentarle que yo también era de Barcelona y que justo estaba pasando esos días en Cuenca. Intercambiamos cuatro palabras, yo le conté un poco acerca de mi viaje y seguimos con el taller sin más.
El hecho es que, más adelante, en un momento de la formación, Xavier, muy simpático él 😊, me hizo subir al escenario para practicar un ejercicio con el.
Recuerdo la escena como si fuera ayer, hizo broma diciendo que había un chico de Barcelona entre el público, y me pidió que subiera al escenario.
En ese momento me arrepentí de haberlo saludado 😅 , pero subí para hacer de voluntario.
Lo gracioso del caso es que una vez en el escenario, cara a cara con Xavi, dispuesto a ayudarle a hacer una dinámica en pareja y delante de un auditorio de cientos de personas, en Cuenca, Ecuador, Xavi me pregunta.
- Entonces Carles, ¿tú eres de Barcelona?
En ese momento, en cuestión de segundos sentí una intuición, sentí que debía rectificar y revelarle mi verdadera ciudad de nacimiento. No es que oculte el nombre de la ciudad donde nací, pero por costumbre, cuando viajo o estoy fuera de mi país siempre digo que soy de Barcelona, por que es más fácil de localizarlo.
De todos modos, llevo más de 10 años viviendo en Barcelona, así que una parte de mí es de la ciudad.
Pero fruto de esa intuición, rectifiqué y le dije:
- Aunque vivo en Barcelona hace unos años, yo realmente he nacido y vivido durante toda mi vida en una ciudad a unos 50 km de Barcelona.
La magia de las sincronicidades
El momento fue espectacular, maravilloso, indescriptible.
Cuando Xavi me escucha decir la ciudad en donde nací se le abren los ojos como platos. ¿Cómo?
Y es que resultó que Xavier también había nacido en la misma ciudad.
Entonces seguimos indagando y nos dimos cuenta que habíamos vivido en el mismo barrio, apenas unas calles separaban su casa de la mía. Y aunque con alguna diferencia de edad, pero habíamos estudiado también en la misma escuela.
No me lo podía creer, estaba en Cuenca, a más de 9.000 km de mi casa, en un proceso de autodescubrimiento y abriéndome a confiar en la vida y en las señales que me estaban brindando y ¿resulta que me había inscrito en un taller con un vecino mío? 😊
Por otro lado, no sé si te lo puedes imaginar, pero la audiencia nos miraba con caras extrañas porque obviamente no sabían lo que estaba pasando y no entendían nada. Parecía un espectáculo de magia trucada.
Al momento, Xavier intentó explicar lo sucedido y seguimos con el taller.
- ¿Cómo se pueden dar estos fenómenos?
- ¿Se alinean los astros en un día, de un año, en un punto cardinal concreto?
- ¿Qué significado hay escondido en estas situaciones?
¿Cómo funciona la sincronicidad?
Supongo que en este momento te gustará saber cómo funciona la sincronicidad, ¿verdad?
Según Jung, la sincronicidad no existe fuera de nosotros, como si fuera un destino sobrenatural. Y esto le quita parte del misticismo o componente mágico que pudiera existir alrededor del fenómeno.
La sincronicidad existe dentro de las personas como un principio de conexión psicológica.
Y lo explica de la siguiente manera “por sincronicidad entiendo la ocurrencia de una coincidencia temporal significativa.
Esta puede adoptar 3 formas:
- La coincidencia de un estado psíquico con su proceso objetivo correspondiente, cuyo acontecer tiene lugar simultáneamente.
- La coincidencia de un estado psíquico subjetivo con un fantasma (sueño o visión) que más tarde aparece como reflejo más o menos fehaciente de un suceso “sincronístico” objetivo que tuvo lugar más o menos simultáneamente, aunque a distancia.
- Lo mismo, salvo que el evento percibido tiene lugar en el futuro y está representando en el presente solo por un fantasma que se corresponde con él.
Mientras que en el primer caso un suceso objetivo coincide con un contenido subjetivo, la sincronicidad en los otros dos casos solo puede comprobarse después, aunque el suceso sincronístico como tal, esté constituido por la coincidencia de un estado psíquico neutro con un fantasma (sueño o visión).
Otras aproximaciones
Como viste en el post anterior, para Jung fue todo un desafío poner en palabras las experiencias que el había tenido con la sincronicidad y darle un contexto científico que probara su veracidad. Obviamente son sucesos que escapan a nuestra mente lógico racional y desafían nuestro pensamiento lineal del tiempo.
Otra aproximación al término la hizo Deepak Chopra, médico, escritor y conferencista hindú, con su libro “SincroDestino” .
No te lo vas a creer, pero encontré este libro en una tienda de compraventa de libros usados en Cuenca también. 😊
Chopra viene a decir que las coincidencias que nos ocurren día a día traen consigo mensajes que debemos descifrar. De alguna manera nos viene a decir que si entendemos las fuerzas que dan forma a las coincidencias, podemos vivir en un nivel más profundo y pleno. El autor propone una nueva manera de vivir a partir de un cambio en la forma de percibir la existencia.
Una vez escuché que más del 80% de las decisiones más importantes de nuestras vidas suceden por casualidad. Tomamos decisiones, conocemos a personas o emprendemos proyectos con procedimientos nada lógicos. ¿Qué opinas?
En mi caso se cumple. Conocí a mi mujer en un avión, mi principal empleo lo encontré fruto de una casualidad y la historia del coaching ya la conoces.
Ahora cuéntame tu, ¿han influido las casualidades o sincronicidades en tu vida?
Te dejo estas 3 preguntas para reflexionar:
¿Crees en las casualidades o sincronicidades?
¿Confías en ellas y te dejas llevar?
¿Cuál es la sincronía más impactante que has vivido?
Me encantará leerte en los comentarios.